11.2.07


«Rimbaud no tenía escritorio. De allí que no hubo nunca otro como él. Todos quieren ser Rimbaud pero con escritorio.»



(Apunte en los diarios de Alejandra Pizarnik)

6 comentarios:

sigamos enamoradas dijo...

Buenos días, gracias por el paseo. Que vuelva.

Natalia J. dijo...

quiero esos diarios, pero la verdad es que no quiero gastar plata en ellos, pues realmente necesito otros libros. Si alguien me lo regala, juro que no me enojo. :)

a la salud!

pd: trabajo en la librería que los exporta directamente de España. Sí, soy una chanta, je!

Victoria dijo...

no tengo piel con Pizarnik


un beso


ps. mi flog actual es ´ya no es porque ha sido´.

Anónimo dijo...

"...yo de chica escribía mucho. Me encantaba escribir. Pero ahora ya no tengo tiempo."

Silvina Luna, argentina contemporánea, revista Maxim nº 20, abril 2006

ÓL dijo...

Esto me recuerda una anécdota que venía en un cuento de Tournier: va y da una charla en una cárcel, y los presos le preguntan sobre el papel (o el deber) del escritor. Tornier lo resumen en una frase: Escribir de pie. Los presos le envian, meses después, un escritorio que ellos mismos construyeron, a imitación de los escritorios de notario de esa época, a la altura del pecho. Con una nota: "para que siga escribiendo de pie".

Thiago. dijo...

Queremos tanto a Alejandra, me compré su prosa completa.