«...A medida que vivo y que me enseña la vida... voy aclarándome muchas ideas y muchos sentimientos de las cosas y de los hombres de América. Me parece que hay la necesidad de una sola gran cólera y de un terrible impulso destructor de todo lo que existe en esos lugares. Hay que destruir y destruirse a sí mismo. Eso no puede continuar; no debe continuar. Puesto que no hay hombres dirigentes con quienes contar, necesario es, por lo menos, unirse en un apretado haz de gentes heridas e indignadas y reventar, haciendo trizas todo cuanto nos rodea o está a nuestro alcance. Y sobre todo hay que destruirse a sí mismo y, después lo demás. Sin el sacrificio previo de uno mismo, no hay salud posible».
Carta de César Vallejo a Pablo Abril
18 de abril de 1928
Carta de César Vallejo a Pablo Abril
18 de abril de 1928
variaciones sobre orfeo /entre orfeo y eurídice/la mirada de orfeo / goces y problemas del escritor / cuerpos
La destrucción fue mi Beatrice
(Stephan Mallarmé)
Sucede que había que destruir y destruir y destruir
(Yves Bonnefoy)
He aquí la palabra: destruye, destruye, destruye
(Marcel Schwob)
rompiste?
2 comentarios:
César Vallejo, grande entre los grandes; ¡Viva el Perú, carajo! Suerte.
Vallejo nada mas certero lo que ha escrito, pero es la ultima frase, amanera de sentencia...del final, ]¿Hay un final? ¿O cada segundo es el final?
Nos estamos rompiendo en cada momento Javier, esta es la vida una sucesión entre la destrucción y la creación...
Abrazos!!
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