4.11.09

una carta de rilke a freud con algunas notas de época




1.
en 1913 freud y rilke dan un paseo. discuten acerca de la transitoriedad de las cosas. luego de esa caminata, freud escribirá lo perecedero.


2.
17 de febrero de 1916
mi estimado profesor freud...
....para llegar hasta su casa estoy demasiado cansado, demasiado contrariado demasiado confuso. sí, estoy en estas diarias situaciones inconmensurables...

...para mí es tan inconmensurable esta cosa extraña y sus exigencias que me vuelvo profundamente rígido...
...pero lo más extraño son los escombros sobre el animo acumulándose día a día...
...a menudo estuve a punto de intentar salvarme del entierro mediante una entrevista con usted. pero finalmente prevaleció la decisión de llevar el asunto solo, mientras a uno le quede aún un turbio trozo de soledad...
...reverenciándolo sinceramente siempre su r. m. rilke


3.
freud iba hacia duelo y melancolía, lou von salomé había dejado atrás su encuentro con nietzsche, rilke iba hacia las elegías de duino, vallejo hacia la cumbre de trilce, mandelstam hacia los campos stalinistas, los físicos hacia la idea de que el observador modifica lo observado, joyce hacia el ulises, eliot hacia la tierra baldía, kafka hacia el insomnio, entre otras tantas cosas...

10 comentarios:

marisa negri dijo...

mis felicitaciones por la riqueza de estos textos y su maravilloso entramado aquí en el blog, es ud un maestro Galarza

gran abrazo

Javier Galarza dijo...

eh señorita negri, que elogio proviendo de usted!

un gran abrazo, siempre.
la acompañamos en sus logros.

Julieta dijo...

Gracias Javier por compartir esto.

Un abrazo

Javier Galarza dijo...

Gracias a vos por la visita, Julieta.

meridiana dijo...

..."He rezado para volver a encontrar mi infancia, y ha vuelto, y siento que aún está dura como antes, y que no me ha servido de nada envejecer"...

Rilke y su excepcional "Los cuadernos de Malte Laurids Brigge", su visión sobre lo terrible en "cada partícula de aire". Ahora releyendo a Celan, vuelvo a él, para bucear y comprender si es cierto como dice Jean Bollack, que, con Celan, Rilke ya no es posible.

Reelaboraciones, metamorfosis, caminos, una obra que perdura, que mantiene esos límites de lo decible.
En ese sentido no tengo más que agradecerte por esta posibilidad de seguir explorando estos cruces y estos autores increíbles, por las preguntas que surgen en el quehacer de la obra.

abrazo

Lilián

Basquiat dijo...

obras definitivas, momentos cumbres del genio y de la reflexión.
un abrazo sergio.

Karol Arcique dijo...

que puedo decir...solo que me llegan estos textos en un momento parecido al que describe Rilke.
Algo casual (aunque no creo en las casualidades) hace un rato releia y escuchaba en la voz de Otto Sander Der Panther, uno de los primeros poemas que leí de Rilke y el que mas me ha gustado

Gracias Javier

meridiana dijo...

Javier: Ya expresé mis felicitaciones en tu nota sobre Rilke.

Creo aproximarme a la diferencia con Celan...veremos qué plantea Bollack al respecto y si coincide con mi hipótesis.
Algo escribiré: es un mérito tuyo las conexiones que, aunque con intermitencias,realizo con la poesía. Gracias.

Liliana

Anónimo dijo...

uno se queda conmovido, turbado, agradecido.

Anónimo dijo...

Rilke alcanza niveles de extremada debilidad. Su obra alcanza la trascendencia y la mística, en un sentido de profunda síntesis. Excelente blog.